Llueve... Llueve en el suburbio
y aquí, solo en esta pieza,
va subiendo a mi cabeza
una extraña evocacion.
Es la pena de estar solo
o es la tarde cruel y fría
que a mi gris melancolía
la convierte en emoción...
Aquí está mi orgullo de antes,
bandoneón de mi pasado
viejo amigo que he dejado
para siempre en un rincón.
En la tarde evocadora
tu teclado amarillento
está mudo y ya no siento
tu lenguaje rezongón.
Mi viejo amigo de entonces
yo voy corriendo tu suerte.
Las horas que hemos vivido
hoy las cubre el olvido
y las ronda la muerte...
Mi bandoneón del recuerdo
hoy como tú ya no existe,
pues para siempre dejé en tu registro
enterrado el corazón...
Hoy la tarde está lluviosa,
bandoneón, por los recuerdos,
y es por eso que me acuerdo
de mis tiempos de esplendor.
Cuando alcé tu caja un día
en un lírico arremango
y ahí nomás me diste un tango,
un gran tango ganador...
Y otra vez cuando "ella" estaba
neurasténica y celosa
con tu música gangosa
la hiciste sollozar...
Bandoneón de mis recuerdos.
Viejo amigo envuelto en pena,
esta tarde tengo ganas,
muchas ganas de llorar.